Adivina, adivinador...
¿QUÉ COSA SOY?
Te puedo contar de lugares exóticos, de política, religión o recetas de cocina y cautivarte durante horas, aunque no puedo hablar en el sentido tradicional del término.
Puedo ser grande o chico, pesado o ligero, muy bueno o muy malo, entretenerte, ilustrarte, hacerte pensar o matarte de aburrimiento, transmitirte mis ideas o contribuir a que elabores las tuyas propias.
Puedo ayudarte en el trabajo o acompañarte en las vacaciones. Los árboles se mueren por mí y la gente a la que le gusto me lleva consigo a la cama.
Suelen exhibirme en escaparates y ferias y construyen para mí grandes edificios. Aunque en ocasiones sucumbo al maltrato de los estudiantes, bien cuidado puedo sobrevivir cientos de años.
Etiquetas: lengua
0 comentarios:
Publicar un comentario
Suscribirse a Enviar comentarios [Atom]
<< Inicio